Para hoy tenemos tiros, tiros 100% arcade que provienen de un título que pasó bastante desapercibido. Su nombre es Crime City y no inventa nada, pero es un juego divertido al que muchos apodan como «el Rolling Thunder de Taito». ¿Será verdad? Vamos a verlo.
Lanzado en 1989 por Taito en exclusiva para máquinas recreativas, en Crime City asumimos el papel de dos súper polis llamados Tony Gibson y Raymond Brody. Posiblemente sus nombres os suenen de cierto hit de Taito llamado Chase H.Q., pero aquí aparcan los coches y salen a limpiar las calles a patita, que están plagadas de escoria criminal.
Se trata de un juego de acción de scroll lateral muy en la línea del ya mencionado Rolling Thunder de Namco, del pintoresco Secret Agent de Data East o del Shinobi de Sega, que lo tenemos más reciente por aquí. A lo largo de seis fases debemos abrirnos pasos a tiros contra facinerosos de todo tipo, que nos harán frente con su buen arsenal de armas. Cada fase cuenta con su correspondiente jefe de fin de fase, que no es más que algún tiparraco armado con algún arma más poderosa de lo normal.
Entre fase y fase nuestras hazañas se muestran en un diario llamado «Daily Taito», con su correspondiente foto en la que aparecemos arrestando al criminal de turno. Así pues nos mediremos con ladrones, traficantes o secuestradores, ya que en las tres últimas fases iremos dentrás de unos tipejos que secuestran al alcade de la ciudad, con un desenlace bastante bizarro, todo hay que decirlo.
Como decimos, Crime City tiene un desarrollo de scroll lateral, pero también hay espacio para alguna que otra fase algo más variada. En cierto punto del juego la cámara se pondrá detrás de nosotros y tendremos que defendernos a base de tiros de oleadas de enemigos, al más puro estilo «shoot ‘em up». Por otra parte hay otra misión en la que bajaremos por una plataforma. En este último tramo tendremos que encargarnos de los enemigos que aparecen por las ventanas de los edificios colindantes.
Nuestro personaje (Tony para el primer jugador y Raymond para el segundo) tiene un abanico majo de movimientos. Aparte de disparar hacia los lados o agacharnos (no se puede disparar hacia arriba), podremos combatir cuerpo a cuerpo con nuestros puños. Ejecutaremos diferentes tipos de saltos y nos deslizaremos por el suelo, todo realizado con solo dos botones de juego.
Contamos con un medidor de energía que se irá agotando a medida que recibamos algún golpe, pero solo golpes con las manos desnudas. En el momento en que recibamos un buen tiro moriremos y nos quedaremos sin una vida. Esto habrá que tenerlo en cuenta, pues Crime City, como es de esperar, se vuelve bastante complicado en ciertos compases del juego.
Echamos de menos algún tipo de movimiento desesperado que barra a los enemigos que hay en pantalla, pero Taito estuvo un poco perezosa con el juego.
Nuestro héroe irá armado con la típica pistola, pero iremos consiguiendo otras armas por el camino. Habrá balas especiales con mejor poder destructivo, ametralladoras o escopetas recortadas. También hay ítems para recuperar energía o aumentar el tiempo de juego. Vamos, lo típico.
Técnicamente es correcto. Sus gráficos no son una maravilla pero los sprites resultan llamativos y todo se mueve bien, sin ralentizaciones y con una acción fluida con muchos elementos en pantalla. Los escenarios tampoco están mal, con calles, puertos y almacenes. Hay algunos elementos simpáticos como las lámparas de los almacenes que, si se rompen, dejarán todo a oscuras. Estos detallitos se agradecen.
A nivel sonoro la música que nos acompaña está muy bien. Todo con un ritmo muy ochentero que recuerda a series como Corrupción en Miami o películas como Arma Letal o Superdetective en Hollywood. El sonido tampoco está mal, con tiros por todas partes y gruñidos digitalizados que pegan bastante bien.
Los colegas de Crime City se controlan muy bien. Como decíamos antes, tenemos un botón para disparar y otro para saltar, resultando todo tan simple y divertido como cabe esperar en estos juegos. Además, el modo para dos jugadores simultáneos nos puede dar para momentazos junto a otro colega, siendo este uno de los puntos más fuertes del juego.
Lamentablemente Crime City no tuvo el éxito esperado por ser demasiado genérico. Quizá por eso no fue portado a ningún sistema doméstico (ojo, no hay que confundirlo con otro Crime City que salió en 1992 para ordenadores, que ese es una aventura que no tiene nada que ver). Y para rematar Taito, que sepamos, no lo incluyó en ninguno de sus recopilatorios del tipo de Taito Legends.
Como hemos dicho, este juego de acción no innova en ningún aspecto, pero resulta muy divertido y no mereció caer en el olvido. Tampoco es el más guapo ni el más moderno, es corto y es muy genérico, pero se deja querer. Además, a nivel personal lo jugué mucho en su momento, por lo que hay posos de cariño con él. ¿Y vosotr@s? ¿Lo conocéis?
Yo no lo conozco ni siquiera por emulación. Y tampoco había leído ni visto nada sobre él, y llevo más de dos décadas visitando páginas y blogs sobre el tema. No lo ví en recreativa y seguramente en su momento me hubiera gustado. Antes de decir nada lo probaré y ya comentaré. Viniendo de Taito espero por lo menos algo entretenido.
Originalidad nula, entretenimiento garantizado. Es lo que es, no defrauda. Prueba y nos dices.
Pues no me parece que esté mal. No es para volverse loco pero efectivamente entretiene y tiene detallitos majos como lo de rodar por el suelo, lo de usar un ascensor rollo Elevator Action, o empujar bidones hacia los contrarios. En general un buen juego. No obstante reconozco que con el poco tiempo que tengo actualmente me he ido alejando de los videojuegos y lo que hace una década me podía parecer un descubrimiento lleno de bellos píxels (como en este caso) ahora se me hace más estándar y repetitivo. De cualquier modo el que pasado tanto tiempo siga descubriendo juegos es todo un lujo, así que gracias por descubrirlos.
Gracias a ti por comentar y por leer los tacos de texto que pongo cada semana. Me alegra ver que te descubro juegos nuevos, a ver si sigo haciéndolo.