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Tres plataformas exclusivos de ordenadores, volumen 1

Los juegos de plataformas no son solo terreno acotado a las consolas. Cierto es que sistemas de Sega o Nintendo acogen en su catálogo un numerosísimo contingente plataformero, el género de moda entre los años 80 y 90, pero los ordenadores también tienen lo suyo. Vamos a ver tres ejemplos exclusivos de ordenadores bastante variaditos.

The Great Giana Sisters

Comenzamos por el más polémico de todos. La gente de Rainbow Arts creó en 1987 un juego llamado The Great Giana Sisters, en principio, para Commodore 64, aunque también fue portado a Amiga y a Atari ST. Se trata de un juego de plataformas de scroll lateral protagonizado por las hermanas Giana y Maria, que vivirán toda una aventura a lo largo de 32 niveles llenos de plataformas y monstruitos.

Suena bien para 1987, ¿verdad? Y más si os contamos que Rainbow Arts, el grupo de programación alemán responsable del juego, utilizó un eslogan un tanto extraño para su lanzamiento en Estados Unidos. Dicho eslogan decía algo así como «the brothers are history» (los hermanos son historia), haciendo clara alusión a cierta pareja de fontaneros. Claro está, The Great Giana Brothers era una copia un tanto descarada de Super Mario Bros. Y ya solo con ver las similitudes en el título imaginamos de qué va la vaina.

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El mundo de las hermanas Giana tiene tuberías y bloques flotantes. ¿No os suena de nada?

Este «pequeño» detalle al usuario de un Commodore 64 le importaba un pepino. Tenía en su poder un juego de plataformas estupendo, con un scroll suave y un control preciso que poco o nada tenía que envidiar a cualquier lanzamiento para consolas. Pero ciertos señores de una empresa llamada Nintendo no opinaban lo mismo.

The Great Giana Sisters fue bastante exitoso, y esto provocó que la existencia del juego llegara a oídos de Nintendo. No se sabe exactamente lo que pasó. Se dice que «La Gran N» amenazó con emprender acciones legales contra Rainbow Arts si el juego no se retiraba del mercado. Y así fue, The Great Giana Sisters se retiró de las tiendas y hoy está bastante cotizado.

Lo más curioso de todo es que en el año 2009 se lanzó un juego llamado Giana Sisters DS, evidentemente, para la consola Nintendo DS. Además se han producido otros lanzamientos de estas simpáticas hermanas, pero cualquier parecido con los juegos de Mario ya es pura coincidencia. Se ve que la polémica inicial se quedó estancada en el tiempo y Nintendo pasó página muchos años después.

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Amiga (izquierda) y Atari ST (derecha) se sumaron a esta fiesta plataformera

Pero volviendo al original, ¿es The Great Giana Sisters un clon descarado de Super Mario Bros.? Pues para ser francos lo es. Todos los elementos del juego de Nintendo están ahí: plataformas, tuberías, mecánicas e, incluso, gran parte del diseño de los niveles. Se cambian los enemigos, los ítems y los protagonistas y ya tenemos juego nuevo, o al menos eso debieron de pensar Rainbow Arts.

Polémicas aparte, The Great Giana Sisters es un juego muy disfrutable que encantó a los usuarios de un Commodore 64. También se vio en Amiga, mejorando (solo un poquito) los gráficos y el sonido. Pinchazo en Atari ST, pues este ordenador no cuenta con scroll y las transiciones a medida que avanzamos son extremadamente bruscas.

Eran los años 80. Este tipo de cosas estaban a la orden del día y en muchos casos se quedaban como simples anécdotas. En cambio, el caso de The Great Giana Sisters fue más sonado, en parte debido al éxito inicial del juego. A nosotros nos ha gustado porque no era algo que se viese mucho en ordenadores de la época. Probadlo porque merece la pena.

Mayhem in Monsterland

No abandonamos al Commodore 64, pues seguimos con uno de sus últimos lanzamientos oficiales, además de ser uno de los pesos pesados del sistema. Su nombre es Mayhem in Monsterland y es uno de los juegos más espectaculares que podemos ver en el ordenador.

Mayhem in Monsterland fue creado por Apex Computer Productions y fue lanzado en 1993. Está protagonizado por una especie de dinosaurio amarillo llamado Mayhem, que vive en Monsterland. Mayhem está enfadado porque Monsterland no es un lugar feliz. Su mundo está consumido por la oscuridad y la tristeza, pero no siempre fue así.

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El mundo de Mayhem está más oscuro de lo normal y solo él podrá deshacer el problema

Resulta que un aprendiz de mago borracho convirtió, con su magia, este feliz lugar en el desolador paisaje que es actualmente. Mayhem quiere recuperar la luz para Monsterland y partirá en la búsqueda de sus poderes mágicos para poder conseguirlo. Pero para ello tiene que contar con la ayuda de su amigo Theo, el culpable de que todo esté así.

Y ante nosotros tenemos uno de los juegos más espectaculares del sistema. Nada más comenzar a jugar vemos que Mayhem in Monsterland está a otro nivel respecto a otros juegos del género. Y lo notamos en su rápido y suave scroll, en su endiablada jugabilidad y en su soberbio apartado técnico.

A nivel técnico bien podría pasar por un lanzamiento para un sistema superior. Sus gráficos aprovechan hasta arriba la curiosa paleta de colores pasteles del Commodore 64, otorgándonos el juego más colorido que podemos ver para este ordenador. Al parecer, para llevar a cabo semejante proeza, los programadores aprovecharon un bug que contenía el chip gráfico del sistema, consiguiendo lo nunca visto. Y no hay que olvidar que salió para un máquina aparecida en 1982.

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Los gráficos y la suavidad de movimientos de esta maravilla parecen de otro mundo

Respecto al tema jugable, Mayhem in Monsterland es otro mundo. Su control es simplemente exquisito, con una precisión de movimientos digna de los mejores juegos de plataformas para consolas. Nuestro amigo Mayhem salta, aplasta a sus enemigos y es capaz de correr a una velocidad endiablada, recordándonos a cierto erizo azul de Sega.

¿Cuál es el problema? Que en su momento pasó bastante inadvertido. Esto es porque en 1993 todo el mundo quería una Mega Drive o una Super Nintendo, por lo que no se le prestó demasiada atención al título de Apex Computer. Menos mal que años después se ha reivindicado, apareciendo diferentes reediciones del juego para coleccionistas, también haciendo que el gran público lo conozca un poco mejor.

Resumiendo. Mayhem in Monsterland es una verdadera locura. Un juego impensable a nivel técnico para un ordenador como el Commodore 64 y que encima sigue siendo muy disfrutable hoy en día. Otro ejemplo que demuestra que cuando se conoce bien el hardware para el que se trabaja se pueden obrar milagros.

Realms of Chaos

Seguimos con un juego de plataformas, pero con algo más de acción y un toque más adulto respecto a los otros dos anteriores. Este es el caso de Realms of Chaos, todo un juegazo creado por la gente de Apogee y 3D Realms que se lanzó en exclusiva para PC en 1995.

En esta ocasión nos trasladamos al mágico mundo de Mysteria, en el que están ocurriendo algo raro, pues una extraña y oscura amenaza se cierne sobre él. Y para desenmascarar estos sucesos tenemos a Endrick, un bravo guerrero, y a Elandra, una formidable hechicera. Juntos deberán recorrer 26 niveles divididos en tres episodios.

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Con el guerrero podremos dar espadazos a diestro y siniestro

Lo más curioso de este plataformas de acción es su mecánica de ir alternando a los dos protagonistas. En cualquier momento podremos escoger entre Endrick y Elandra, que tienen diferentes habilidades. Esto proporciona cierto componente estratégico, ya que Endrick es más ducho y fuerte con la espada, mientras que Elandra puede lanzar ataques a distancia y es más ágil y rápida. Será decisión nuestra utilizar a uno o a otro en función de la situación.

Por lo demás Realms of Chaos es un sólido juego de plataformas en todos los sentidos. Salvo la opción de alternar entre personajes no ofrece nada nuevo en el género, pero en 1995 siempre era de agradecer títulos así al no abundar en el catálogo de un ordenador como el PC.

Sus coloridos gráficos VGA se combinan con una banda sonora en MIDI (obra del mítico Bobby Prince, el tipo que le puso sonido a Doom), y sonidos digitalizados, consiguiendo un conjunto más que notable. Pero la estrella es la jugabilidad, que nos ofrece un control muy asequible y sencillo, resultando ser un juego muy divertido, largo y con una dificultad que irá aumentando a medida que avanzamos.

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La hechicera nos vendrá mejor para ataques a distancia y saltos más complicados

También es de recibo recalcar que Realms of Chaos tiene un componente violento bastante elevado. Esto no es el típico juego de plataformas colorido y simpaticón al que muchas veces nos acostumbraban en los 90. Su fuerte componente de acción muestra en escena un poquito de sangre y gore pixelado, cosa que ya se anunciaba en su día en la portada del juego, no aconsejándolo para ciertas edades.

En su momento era de esos juegos que se distribuían en formato shareware, es decir, que podías jugar más o menos gratis al primer episodio, dándote la posibilidad de pagar más si querías el resto del juego. Era muy habitual encontrarlo en discos recopilatorios de este tipo de software. Hoy se puede jugar sin problemas en plataformas digitales, ya que está disponible para su compra para ordenadores.

Realms of Chaos está muy bien. Es uno de esos juegos de la mítica Apogee que enganchan de lo lindo, gracias en parte a su sencilla jugabilidad y a sus altas dosis de acción. La opción de controlar a dos personajes le da personalidad propia y es de lo mejor que se podía encontrar a mediados de los 90 para PC dentro del género plataformero.

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