Resulta que hace no mucho vi en el cine Blade Runner 2049, película que me sorprendió y que resultó ser una más que digna secuela de una de las joyas de la ciencia-ficción más incomprendidas de todos los tiempos. Por ello me acordé que hace bastantes años jugué a una de las aventuras gráficas más espectaculares de las que tengo memoria, y por este motivo hoy «peliculearemos» un poco sobre Blade Runner, sobre la peli y sobre un tremendo juegaco que vio la luz muchos años después en PC.
LA PELÍCULA
A principios del siglo XXI, la Tyrell Corporation desarrolló un nuevo tipo de robot llamado Nexus, un ser virtualmente idéntico al hombre conocido como replicante. Los replicantes Nexus 6 eran superiores en fuerza y agilidad y al menos iguales en inteligencia a los ingenieros en genética que los crearon. En el espacio exterior, los replicantes fueron usados como trabajadores esclavos en la arriesgada exploración y colonización de otros planetas. Después de la sangrienta rebelión de un equipo de combate de Nexus 6 en una colonia sideral, los replicantes fueron declarados proscritos en la Tierra bajo pena de muerte. Brigadas de policía especiales con el nombre de unidades de «Blade Runners» tenían órdenes de tirar a matar al ver a cualquier replicante invasor. A esto no se le llamó ejecución, se le llamó retiro.
Y así, doblado con la grandiosa voz del tristemente desaparecido actor Constantino Romero, comienza una de las mayores obras maestras de la ciencia-ficción de todos los tiempos: Blade Runner, que nos traslada al año 2019, que está a la vuelta de la esquina, y nos presenta un futuro apocalítico en el que se cuenta la historia de Rick Deckard (Harrison Ford), un «Blade Runner» jubilado al que encomiendan una nueva misión: perseguir a unos peligrosos replicantes Nexus 6 que la pueden liar muy gorda.
Con esta premisa tan atractiva a priori, Blade Runner fue dirigida por Ridley Scott y estrenada en el año 1982, basándose en un libro llamado ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?. Protagonizada por actores de la talla de Harrison Ford, Daryl Hannah, Sean Young o el inolvidable Rutger Hauer como Roy Batty y con la apabullante banda sonora del genial Vangelis, Blade Runner lo tenía todo para triunfar, sin embargo en su momento no cuajó a causa de un desarrollo lento entre otras cosas. Fue años más tarde cuando fue lanzada a formatos domésticos que Blade Runner triunfó.
En mi opinión es una verdadera cinta de culto que ningún fan del género debería perderse. Con una carga artística y visual tremenda, posee un argumento que si bien, como ya he dicho antes, tiene un desarrollo lento, merece mucho la pena, pues se debaten cuestiones morales y filosóficas. Y todo con una ambientación brutal a nivel audiovisual. De verdad que merece y mucho la pena.
EL JUEGO
Obviando un jueguecillo de acción que salió en 1985 de la mano de CRC Group para Amstrad CPC, Commodore 64 y Spectrum del cual desconocía su existencia y no sé qué tal estará, Blade Runner vivió en PC su máximo explendor. Se trata de un pedazo de aventura gráfica que apareció en 1997 de la mano de los legendarios Westwood Studios, autores de verdaderas maravillas como los primeros Command & Conquer o la saga de RPGs Lands of Lore, y que llegó embutido en 4 CDs bien completitos.
El juego sigue el mismo argumento que la película y transcurre al mismo tiempo, pero en esta ocasión viviremos una nueva aventura controlando a Ray McCoy, otro «Blade Runner» del mismo palo que Deckard y que, tras una espectacular introducción, comenzará su periplo investigando un caso relacionado con una tienda de animales un tanto, digamos, peculiar. Y es que al parecer alguien a atracado la tienda, ha matado a los animales y se sospecha que el autor puede ser un replicante. A partir de este punto nuestro trabajo consiste en esclarecer qué demonios ha pasado allí a base de preguntar a sospechosos, recoger pruebas e ir metiéndonos de lleno en el oscuro mundo «cyberpunk» de Blade Runner.
El manejo es bien simple. Se trata de la típica aventura «point and click», pero muy simplificada, y es que sólo manejaremos el cursor con el ratón para realizar todas las acciones disponibles durante el juego. En este caso la flecha de nuestro ratón se cambiará a verde y se moverá cuando encontremos un punto en el que interactuar.
Como decimos, nuestra labor detectivesca nos llevará a interrogar a una buena serie de personajes, cada uno con una personalidad diferente. Utilizaremos un ordenador llamado ESPER que nos permitirá analizar los objetos que encontremos por ahí, tales como fotografías o documentos y así poder sacar alguna que otra conclusión para saber qué demonios está pasando. Además, el test de «Voight-Kampff», famoso en la película, también hará acto de presencia. Este test nos permitirá medirnos con los sospechosos, determinando si son humanos o replicantes, y de paso tomar una serie de decisiones morales, ya que en nuestras manos dependerá si creemos que el sospechoso dice la verdad y lo dejamos marchar o miente y lo detenemos o lo matamos. Ya véis que no es una tarea nada fácil.
Además, entre las opciones disponibles en el juego destaca la opción de controlar las emociones de nuestro personaje, opciones que podemos cambiar en cualquier momento. De esta forma, nos podemos prestar a los interrogatorios de cuatro maneras posibles: podemos ser amables y mostrar buena cara y disposición, podemos ser agresivos para que el sospechoso vea que no estamos bromeando, seremos neutrales con el fin de que no sospechen nada y, por último, nos podemos mostrar algo más despistados en plan «a ver que sacamos haciéndonos el tonto».
Todas estas acciones serán fundamentales para el desarrollo del juego, ya que influyen en la conclusión que vamos a obtener. Y de esto dependen los diferentes finales de los que se componen el juego, que son unos 13 que además cuentan con diferentes variaciones, así que tendremos que ir pensando muy bien nuestra actuación si queremos llegar a ver un final decente y que acabe más o menos bien.
Técnicamente es un juego absolutamente apabullante. Cuenta con gráficos pre-renderizados con una buena resolución para la época y unos personajes bien animados, aunque algo pixelados. Los escenarios son brillantes y llenos de detalle, muchos de ellos sacados directamente de la película. Si a todo este espectáculo le unimos que hay más de 100 escenarios, unos 70 personajes, efectos especiales por doquier, cinemáticas muy bien realizadas y la tremenda y absorbente historia que viviremos, Blade Runner es una auténtica monstruosidad.
El apartado sonoro merece una mención aparte. Además de la espectacular banda sonora, claramente inspirada en la película, Blade Runner se encuentra perfectamente doblado al castellano, y eso es algo muy bueno para el que no domine la lengua de Shakespeare, ya que no hay subtítulos, o al menos yo no los he encontrado. Por cierto, tanto en inglés como en castellano, el doblaje se sitúa a un nivel muy alto, contando con una muy buena selección de voces.
Para terminar deciros que hoy en día es muy complicado encontrar este juego, ya que no hay ninguna tienda online que lo ofrezca previo pase por caja y adaptado a los ordenadores actuales. Nos toca tirar de descargas y hacerlo funcionar es bastante complicado. En mi caso me lo dejaron hace muchos años con su caja original y todo, así que pude disfrutarlo en condiciones, pero para esta ocasión tuve que descargar dos versiones el juego, una en inglés y otra en castellano, con sus correspondientes parches y hacer una especie de «Frankenstein» para poderlo jugar. Si buscáis por foros y sitios de esos no debería ser difícil dar con él, pero hacerlo funcionar y que se vea medianamente decente en Windows 10 ya es otra historia.
Me ha gustado mucho rememorar esta enorme y genial aventura gráfica que, con motivo de la cinta Blade Runner 2049 volvió otra vez a mi memoria. Un juego que bien se podría catalogar como obra maestra y que se equipara perfectamente a la otra obra maestra en la que se basa. Mi absoluta recomendación, tanto para el juego como para la película, por si acaso alguien no se ha enterado que existe, cosa que dudo.
