Los «exclusivos» de Pixelmaniacos vuelven a la palestra con otra entrega de tres plataformas exclusivos de ordenadores. Os ofrecemos tres juegos de plataformas que no se vieron en consolas, son cosa de Amiga, PC, Atari ST, Commodore 64 y Amstrad CPC. ¡Al ataque!
Flimbo’s Quest
El nombre de System 3 solía ser sinónimo de calidad en ordenadores como Amiga. Suyas son las entregas de The Last Ninja o grandes títulos como Myth: History in the Making o International Karate+, por citar algunos. De hecho, su último lanzamiento data del año 2019, aunque no tenemos muy claro si todavía están en activo.
De sus manos y de las de una desarrolladora llamada Euphoria apareció Flimbo’s Quest, un juego de plataformas lanzando en 1990 para los ordenadores Amiga, Atari ST, Commodore 64 y Amstrad CPC. Se trata de un juego de esos que entra por los ojos desde el primer momento, en especial gracias a su colorido apartado técnico.
En Flimbo’s Quest controlamos, cómo no, a Flimbo, un muchachillo locamente enamorado de una chica llamada Pearly. Resulta que el malvado científico loco de turno, el Doctor Franz Dandruff, persigue la inmortalidad, pero tras un fallido experimento lo que ha conseguido es envejecer más rápido. El caso es que el tipo este necesita a una joven bella y sana para volver a ser joven de nuevo, y ahí es cuando secuestra a Pearly y Flimbo tiene que rescatarla.
Para poder acabar con Franz Dandruff, Flimbo tendrá que recorrer una serie de niveles en busca de unos códigos. Dichos códigos, formados por letras, que sirven para rescatar a Pearly, tendrán que ser introducidos en un ordenador. Para obtenerlos, en cada nivel encontraremos una serie de enemigos marcados con una de las letras en su poder. Al conseguir todas las letras, un mago nos echará un cable y formaremos una palabra completa. Y así a lo largo de los siete niveles del juego.
Nuestro héroe salta y dispara, moviéndose por las diferentes secciones de plataformas de cada escenario. Recogeremos dinero que nos servirá para para potenciar nuestra arma o conseguir otros objetos que compraremos en la tienda del mago.
Como podéis ver, Flimbo’s Quest no es un juego muy lineal precisamente. Tampoco es el gran ejemplo de la variedad, pero el control de Flimbo es sencillo y la experiencia puede resultar bastante entretenida.
Por otro lado, Flimbo’s Quest no destaca mucho por el diseño de enemigos, de hecho estos son bastante pequeños y no hay mucho donde escoger. Sin embargo, esto no quiere decir que el título no sea llamativo en lo técnico. Esto es notable en la versión de Amiga, que cuenta con un scroll envidiable y unos escenarios muy chulos.
El resto de conversiones son también bastante buenas y se juegan muy bien, destacando también la de Commodore 64 por tener un gran scroll. Por cierto, la versión de Commodore 64 salió también cartucho para la consola Commodore 64 GS, pero no la vamos a tener en cuenta al ser el mismo juego pero en formato cartucho.
No estamos ante el mejor juego de plataformas para ordenadores, pero Flimbo’s Quest tiene algo que lo hace especial. Es bonito y divertido, y además viene de una grande como System 3, algo que le da un plus de garantía a un producto más que decente.
Hocus Pocus
Vamos con el PC y con la también mítica Apogee. En aquellas distribuciones shareware de los 90 siempre se encontraban cosas interesantes como este Hocus Pocus (ojo, no confundir con la peli esa de las brujas que salió más o menos por esa época), obra de Moonlight Software con Apogee en la producción que apareció en PC en 1994.
Seremos un joven aprendiz de mago cuyo objetivo es el de entrar en el consejo de magos de Lattice, además de casarse con Popopa, su amada y esas cosas. Los magos, caprichosos como ellos solos, le piden a nuestro amigo reunir una serie de cristales mágicos, y para ello viviremos una peligrosa aventura que nos convertirá en un mago de tomo y lomo.
El joven Hocus Pocus, que se llama igual que el juego, recorrerá un buen puñado de niveles bastante laberínticos. Salir airoso de cada nivel puede ser una tarea complicada, ya que hay interruptores que activar y llaves que recoger y usar si queremos avanzar. No es un juego para nada lineal y todo se va complicando a medida que avanzamos.
Además, las hordas de enemigos pueblan cada uno de los niveles. Para superarlas, nuestro buen mago puede saltar y disparar hechizos. Estos hechizos los iremos potenciando con ítems que encontraremos en nuestro periplo, así obtendremos diferentes tipos de disparos, a cada cual más poderoso. Por cierto, hay cuatro capítulos con varios niveles cada uno, al menos en la versión completa, no en la versión shareware.
A simple vista Hocus Pocus no parece que tenga unos gráficos maravillosos. Sí, son VGA con 256 colores, cosa que se agradece en este tipo de productos, pero los escenarios son muy parecidos y nos da la sensación de estar encerrados. El sonido cumple, con melodías MIDI bastante buenas y efectos de sonido digitalizados.
Por otra parte, Hocus Pocus no cuenta con un scroll excesivamente suave. Sí, se mueve bien y se juega estupendamente, pero tampoco es el culmen de la suavidad. Eso sí, es un juego que pica de lo lindo y nos invita a superar nivel tras nivel.
En España fue muy popular, especialmente porque se solía regalar en muchas publicaciones al igual que otros títulos de Apogee, por lo que si le preguntas a cualquier usuario de PC de los 90 probablemente reconocerá el juego sin pensar mucho.
Hocus Pocus es un juego muy divertido. Sus laberínticos niveles tienen un buen diseño y presenta un buen desafío para los jugadores ansiosos de plataformas en PC. Todo un clásico que desde Pixelmaniacos recomendamos sin pestañear. Por cierto, si os llama, está disponible en Steam y GOG.
Superfrog
Para finalizar tenemos a una rana con poderes. Superfrog, que así se llama este juego de plataformas, es asunto de Team 17, los autores del genial Worms. Apareció en 1993 en Amiga, pero en 1994 también fue portado en PC. También hay una versión para Amiga CD32, pero al ser un Amiga consolizado no lo tenemos en cuenta para esta sección de exclusivos.
El argumento nos habla de un príncipe que fue transformado en rana por una bruja, vamos, lo mismo que en los cuentos. Luego resulta que la bruja también secuestra a nuestra amada, como siempre, y ahí vamos nosotros en su búsqueda. Pero bueno, el argumento es lo de menos, lo que nos importa es el desarrollo del juego.
Superfrog nos brinda la posibilidad de controlar a una rana con capa y ciertas habilidades. Nuestro amigo corre y salta como nadie, un poco en la línea de juegos como Sonic the Hedgehog, pero con personalidad propia. También saltaremos sobre los enemigos para darles para el pelo, aunque con algunos objetos podremos disparar.
Cuenta con un buen diseño de niveles a lo largo de los cinco mundos de los que se compone, cada uno con una serie de fases. El ellos debemos alcanzar la salida y escapar airoso de todos los peligros, siendo un juego de plataformas puro y duro. Al final, nos esperará la bruja, a la que nos tendremos que enfrentar para rescatar a nuestra querida, aunque con cierto desenlace que no es el esperado.
Todo lo que rodea a Superfrog rebosa simpatía. Los enemigos y la propia rana son de lo más «salao», pero también está ese colorido que lo impregna todo, da igual qué versión juegemos, si a la de Amiga o a la de PC.
Además, gracias al suave scroll y a las buenas animaciones, el control del personaje resulta muy bueno, con unos saltos bastante precisos. Eso es significativo, ya que hay algunas secciones en las que será fácil perder una vida si no tenemos cuidado. Por otro lado, el tema del sonido también está cuidado, con buenas melodías y buenos efectos sonoros.
El caso es que Team 17 relanzó Superfrog en 2013 bajo el nombre de Superfrog HD. Se trataba de un remake con gráficos mejorados, nuevos niveles y enemigos de fin de fase. Salió en PC, PlayStation 3, PlayStation Vita, MAC, Linux y dispositivos Android e iOS.
Superfrog es todo un acierto. Un juego divertido y muy chulo técnicamente que no tiene nada que envidiar a los grandes títulos de plataformas para consolas. En nuestra opinión, Team 17 lo bordó con este lanzamiento, y se nota que puso mimo y dedicación para uno de los mejores títulos de plataformas que podemos encontrar en Amiga y PC.
Solo jugué a Hocus Pocus en una de esas ediciones shareware que mencionas. Cierto que algunos juegos de Apogee solían salir «de regalo» en algunas revistas como Tiempo y otros periodicos. Recuerdo el Raptor Call of the shadows por ejemplo.
A los otros no he jugado, me suelen gustar los juegos de Amiga.
De la revista Tiempo todavía conservo unos cuantos como Realms of Chaos, Alien Carnage o Blake Stone, de hecho acabo de rescatar una vieja torre con un Pentium II y Windows 98 para echar unos vicios. Qué míticos los juegos de Apogee.
Prueba los otros dos sin dudarlo, especialmente Superfrog.