- Compañía: Arcade Zone
- Año: 2013
- Género: Acción
- Plataforma: Super Nintendo
Hoy en día ya es bastante habitual ver que siguen saliendo juegos para sistemas antiguos. Pueden ser los llamados «homebrew» (juegos caseros no oficiales) o lanzamientos puros y duros de manos de profesionales, como es el caso del juego que os traemos hoy.
Nightmare Busters, todo un señor cartucho para Super Nintendo, fue desarrollado a mediados de los 90 cuando la consola se encontraba en pleno apogeo. El tema es que por motivos que desconocemos fue cancelado prácticamente terminado, pero regresó a la vida unos 15 años después.
En su momento fue desarrollado por Arcade Zone, compañía de la que os sonará Legend, también para Super Nintendo. Y es en 2013 cuando los chicos de Super Fighter Team lo terminaron de acicalar y lo lanzaron en cartucho, con su cajita, su manual y sus versiones para USA y Europa bien diferenciadas. Por cierto, hoy en día está agotado, pero se puede jugar vía emulación.
¿Y de qué va el juego? Pues que nos vamos a un mundo mágico en el que un tipo conocido como Tyrant (tirano en inglés) ha descubierto como entrar en los sueños de los niños y hacerles la puñeta, y todo para su regocijo personal. Para frenar tamaña fechoría tenemos a los duendes Flynn y Floyd, duchos en magia y muy capaces de vencer al capullo de Tyrant.
Y nos lanzamos a la aventura de Nightmare Busters, juego de acción con toques plataformeros (un tanto «run and gun») que recuerda un poco al genial Midnight Wanderers del recopiratorio arcade Three Wonders. Esto es en parte por el desarrollo del juego, muy similar, y por ciertas habilidades de los personajes. Además también tiene un genial modo para dos jugadores.
Lo dicho. Iremos avanzando por mágicos escenarios, lanzando diferentes hechizos como cartas mágicas, ondas de energía o llamaradas en cuatro direcciones. Nuestro objetivo es ir avanzando y llegar al temible jefe de fin de fase si queremos pasar de nivel, aunque entre medias también veremos otros jefes de menor categoría a los que derrotar.
La selección de enemigos no parece extremadamente variada. La mayoría son feos trolls a los que unir murciélagos o mariposas como enemigos más básicos. Respecto a los jefes ahí ya tenemos algo más de variedad, ya que encotramos más trolls de diferentes tipos, ciertos lagartos o algún que otro bicho volador. Los jefes ganan en tamaño cuando se trata del jefazo de fin de fase, especialmente Tyrant, que abarca buena parte de la pantalla.
Vamos con el control. Nightmare Busters es sencillo de manejar, con un botón para disparar, otro para saltar y un tercero que nos permitirá ejecutar uno de esos ataques desesperados con los que barrer la pantalla de enemigos. Estos ataques son limitados e iremos recuperándolos a medida que avanzamos. Resultan muy espectaculares y útiles.
Si dejamos pulsado el botón de disparo nuestro duendecillo se pondrá en plan Goku a cargar todo su poder. Tras llegar al final de la típica barra de energía y soltar el botón ejecutaremos otro ataque desesperado. Esta vez nos lanzaremos a lo largo de la pantalla destruyendo cualquier cosa que encontremos por delante. Estos ataques también son limitados.
También podremos trepar por las diferentes secciones de plataformas y colgarnos de ellas. Y por si fuera poco tenemos la habilidad de deslizarnos por el suelo, algo especialmente útil durante los combates contra los jefes finales. Con esto se concluye que nuestro personaje está bien surtido en cuanto a habilidades se refiere.
A nivel gráfico estamos ante uno de esos juegos de Super Nintendo en los que abunda el colorido. Personajes grandes se mueven por coloridos escenarios. Efectos especiales como transparencias y otros elementos como el fuego están muy bien realizados. Quizá un poco más de velocidad no le hubiera venido mal, pero apenas se notan ralentizaciones cuando hay muchos elementos en pantalla.
El apartado sonoro también está a un buen nivel. Las típicas melodías orquestales del chip de Super Nintendo están presentes, dándole al cojunto un toque muy mágico. Los efectos sonoros son algo escasos y pasan algo desapercibidos, pero no desentonan con la acción.
Como ya hemos dicho antes, el control del personaje es sencillo. Esto último, unido a la opción para dos jugadores simultáneos, nos va a proporcionar buenos momentos de diversión a lo largo de los seis niveles que tiene el cartucho. Eso sí, hay que señalar que la dificultad es un poco alta, pero con paciencia y práctica se puede llegar a terminar el juego de una pasada porque tampoco es muy largo.
Si te gustan los arcades de este tipo y tienes una Super Nintendo, Nightmare Busters es sin duda una opción muy interesante, ya que por unos 30€ tienes el cartucho con la caja y todo en su versión PAL. La verdad es que no entendemos porqué se canceló en su día. Al menos lo hemos podido disfrutar, demostrando eso de «nunca es tarde si la dicha es buena», y en este caso la dicha es muy buena.
