Halloween siempre es una época estupenda para dar una vuelta por el género del terror en los videojuegos. Por este motivo este año hemos querido dar un repaso a una de las sagas que más influyeron en los «survival horror» modernos. Hablamos, por supuesto, de Alone in the Dark.
Haunted House para Atari 2600 es considerado el primer juego de terror, Sweet Home para la Famicom japonesa se podría denominar como el abuelo de Resident Evil, pero Alone in the Dark es otra cosa. Sus gráficos poligonales y su ambientación mucho más adulta y, realista, por llamarla de alguna manera, sí que influyeron en Resident Evil, Silent Hill y otros exponentes del género que hoy nos tienen aterrorizados.
Alone in the Dark
El juego que lo inició todo fue creado por Infogrames y lanzado en 1992 para PC, apareciendo en otras plataformas tiempo después. Se trata de un juego de aventura con personajes 3D sobre fondos 2D y con un sistema de cámaras fijas.
El argumento de Alone in the Dark nos lleva a los Estados Unidos de 1924. Jeremy Hartwood, conocido artista, se suicida en la mansión Decerto, en Luisiana. Pero todo esto es muy extraño, pues hay rumores de que la mansión está habitada por una indescriptible fuerza maligna. Tras estos hechos tan raros hay dos personas que realmente quieren investigar qué demonios, y nunca mejor dicho, ha pasado.
Ellos son el investigador privado Edward Carnby con su bigotón, y Emily Hartwood, sobrina de Jeremy, quién está muy interesada en la muerte de su tío. Y tendremos que seleccionar a uno de estos dos personajes para darnos un garbeo por la mansión y descubrir lo que más temíamos: que los rumores son ciertos.
Nuestra partida comienza en el desván de la casa. Tendremos que ir investigándola habitación por habitación, rincón por rincón. Recogeremos objetos, resolveremos puzles y nos enfrentaremos a todo tipo de criaturas malignas, bien con nuestros puños o bien empuñando algún tipo de arma. Y es que en cada rincón de la mansión de Alone in the Dark se esconde un tenebroso secreto que debemos ir resolviendo poco a poco y, de paso, sobrevivir, si podemos, claro.
El control de los personajes es bastante complicado al principio. Se trata del llamado «control tipo tanque» que creó este juego y que popularizaron los primeros Resident Evil. Y sí, es bastante tosco y el tiempo no lo ha tratado demasiado bien. Podremos correr, empujar objetos, recogerlos o, como hemos mencionado antes, luchar. Esto último ya es bastante rudimentario y si lo probáis hoy quizá os pueda echar para atrás, pero es que en 1992 no había otra cosa, así que Infogrames tuvo que inventarla.
Alone in the Dark también cuenta con un inventario. Con él podremos combinar ciertos objetos, recargar armas o seleccionar cuál es la acción principal que va a ejecutar nuestro personaje. Esto último quiere decir que si seleccionamos «luchar» no podremos, por ejemplo, empujar objetos. Para «empujar» habría que entrar en el menú y cambiar la acción que queramos llevar a cabo.
La atmósfera que genera Alone in the Dark fue algo único en su época. La sensación constante de estar en peligro y de poner en tensión al jugador era lo más. Sus personajes poligonales, con unos movimientos muy realistas en su día, resultaban espectaculares. Lo mismo para su banda sonora, especialmente la de la versión en CD, y a sus digitalizados efectos sonoros. Todo está perfectamente conectado y el jugador en 1992 podría llegar a asustarse con algunos momentos.
Lo malo es que para los estándares de hoy en día ha envejecido bastante mal. Técnicamente es ya bastante feo, pero no hay que restarle valor, pues, recordemos, estamos ante un juego de 1992. El problema es que su control y sus mecánicas están muy anticuadas y cuesta un poco hacerse con su jugabilidad. No obstante, si lo conseguimos, disfrutaremos de toda una aventura con mayúsculas que, además, cuenta con un argumento muy currado y muy adulto que merece mucho la pena.
Como decíamos más arriba, Alone in the Dark también salió en otros sistemas. Se vió en ordenadores menos populares como el FM Towns, el PC-98 de NEC o el Acorn 32bit, además de equipos MAC. En consolas se vio en 3DO, resultando bastante inferior al original para PC en todos lo sentidos. Por último, en 2014, Atari, quién se quedó entonces con los derechos de la saga, lo lanzó también para dispositivos iOS de Apple.
Era de esperar que un juego como Alone in the Dark cosechara éxito y unas buenas críticas, por lo que una secuela no tardó mucho tiempo en gestarse.
Alone in the Dark 2
Y así fue, Alone in the Dark 2 apareció un año después, en 1993, de nuevo con Infogrames a los mandos y de nuevo para PC, aunque también fue lanzado en más plataformas. El juego seguía desarrollándose bajo el mismo motor gráfico de su predecesor, así que otra vez hay personajes 3D sobre fondos 2D y cámaras fijas.
Alone in the Dark 2 se aleja un poco del componente aventurero de la primera parte, ofreciéndonos más acción y una especial atención a las armas de fuego. Esto fue un tema bastante delicado y conflictivo dentro del seno de Infogrames, llevando a algunos de sus miembros a abandonar la compañía para centrarse en otros proyectos (Adeline Software, por ejemplo, los de Little Big Adventure). Así pues podríamos decir que este es el Alone in the Dark de la discordia.
Dejando la polémica de lado, esta secuela vuelve a tener lugar en 1924. Edward Carnby, uno de los protagonistas de la primera entrega, vuelve a la carga para investigar a un contrabandista llamado Jack el Tuerto. Ted Stryker, antiguo colega de Carnby, ya lo investigó, descubriendo que Jack había secuestrado a la joven Grace Saunders y la tiene encerrada en una mansión situada en un lugar llamado Hell’s Kitchen.
Stryker intenta rescatar a la pequeña Grace, pero trístemente es interceptado por el malvado Jack y sus secuaces, que lo mandan a mejor vida. Estos seres son piratas del siglo XV que han vuelto a la vida gracias a los poderes de una bruja. El bueno de Carnby tendrá que hacer frente a una nueva amenaza sobrenatural.
Y nada más comenzar ya nos damos cuenta de que Alone in the Dark 2 es algo diferente a su predecesor. Para empezar el nivel de dificultad es altísimo. Esto es provocado en parte por culpa de ese control tan tosco que arrastra de la primera entrega, siendo bastante complicado apuntar a ciertos enemigos. Además, la cámara nos puede jugar alguna que otra mala pasada en los peores momentos.
Como decíamos al principio aquí se le da mucha importancia a las armas. Pistolas y ametralladoras cobran un gran protagonismo. Y sus cargadores más todavía, pues habrá que racionar bien la munición si no queremos que algún zombie piratesco nos haga morder el polvo.
Pero también hay buenas ideas. Se introdujo la posibilidad de controlar a otro personaje durante la partida, alternando entre Carnby y la pequeña Grace. Con ella tendremos un componente más táctico, ya que no puede portar armas y tendrá que esconderse para salir del paso. Esto fue algo muy novedoso en su día.
El juego se vio, además de en PC, en otros sistemas de la época. De nuevo FM Towns, PC-98 y MAC están en el apartado de ordenadores. En consolas volvió a 3DO, de nuevo, con una versión técnicamente inferior a la original de PC.
Bajo el nombre de Alon in the Dark: Jack is Back o Alone in the Dark: One-Eyed Jack’s Revenge, el título aterrizó en PlayStation y Saturn. Este contó con un apartado técnico más potable, añadiendo texturas a los modelados de los personajes, pero con la misma mecánica tosca más enfocada a la acción del original.
Había que intentarlo. Infogrames quiso cambiar algunas cosas del original en este Alone in the Dark 2, pero el cambio no gustó a muchos. La narrativa oscura del primer juego había desaparecido a favor de una historia de piratas zombies, los puzles no están tan logrados y el control torpe en los momentos de acción lo hacen innecesariamente difícil. No obstante se los errores se aprende y hubo espacio para un tercer juego.
Alone in the Dark 3
En 1994 Infogrames volvió a los orígenes con la tercera parte. Alone in the Dark 3 (con el subtítulo Ghosts in Town en posteriores rediciones), que apareció también en PC, además de ordeandores MAC y PC-98, fue la primera entrega de la serie en salir exclusivamente en formato CD-ROM, abandonando las versiones en disco de las entregas anteriores. También es el primero en ser doblado al castellano.
El bueno de Carnby vuelve a estar «solo en la oscuridad» por tercera vez. En esta ocasión nos vamos a 1926 y Carnby tiene que investigar la desaparición de todo un equipo de rodaje de una película ambientada en el salvaje Oeste. Entre los desaparecidos también está Emily Hartwood, protagonista del primer juego, que terminó haciendo carrera en el mundo del cine.
Nada más llegar a Slaughter Glutch, el pueblo fantasma en el que tiene lugar el rodaje, Carnby descubre de nuevo que hay una fuerza sobrenatural detrás de todo esto. Y efectivamente es así, pues Jebediah Stone y su panda de cuatreros fantasma nos pondrán las cosas difíciles, muy difíciles.
Alone in the Dark 3 vuelve a los orígenes, ofreciéndonos una aventura donde priman más los puzles que la acción. Todo con el mismo sistema de control que en entregas anteriores y el mismo motor gráfico, con una fórmula que ya mostraba muchos signos de agotamiento.
Entre las novedades de esta tercera entrega destaca el tamaño del mapeado, que es bastante más grande que en los otros dos juegos anteriores. Eso sí, su desarrollo sigue siendo algo lineal en comparación con, especialmente, el primer Alone in the Dark.
No sabemos muy bien qué ocurrió. El argumento, que está bastante bien hecho, puede resultar algo ridículo si tenemos en cuenta que estamos lidiando contra vaqueros zombies. Además su apartado técnico ya empezaba a ser anticuado, por lo que este Alone in the Dark 3 no cosechó el éxito esperado e Infogrames tuvo que aparcar la saga durante unos años.
Alone in the Dark: The New Nightmare
Tuvimos que esperar hasta 2001 para ver la cuarta parte de la serie que, en esta ocasión, hacía borrón y cuenta nueva. Su nombre es Alone in the Dark: Thew New Nightmare y también salió para PC, versión en la que nos hemos centrado para comentar el juego.
Edward Carnby vuelve a la carga, pero esta vez nos olvidamos de los años 20 y nos vamos al presente, con un Carnby mucho más joven que se aleja de todo los visto anteriormente. Junto a su compañera Alice Cedrac, viajará a una misteriosa isla para investigar la muerte de Charles Fiske, el mejor amibo de Carnby.
Antes de llegar a la isla el avión en el que viajaban es derribado por una fuerza sobrenatural. Ambos saltan en paracaídas, pero el salto los separa, acabando cada uno en diferentes puntos de la isla. Y ahí entramos nosotros, escogiendo a uno de los dos investigadores y enbarcarnos en una gran aventura.
Lo primero que llama la atención de Alone in the Dark: The New Nightmare es su tremendo parecido con la saga que ayudó a crear: Resident Evil. El sistema de cámaras fijas sigue presente, pero esta vez los modelos 3D de los personajes, que son más que decentes a nuestro juicio, se mueven por escenarios prerrenderizados. Además, ese desarrollo en plan dos juegos en uno, ¿no os recuerda un poco a lo visto con Leon y Claire en Resident Evil 2? Pues sí, Darkworks, la desarrolladora, bebió y mucho del clásico de Capcom.
Pero también tiene ideas propias. El uso de la linterna es genial y está muy logrado, siendo un elemento fundamental en esta aventura. También se potencian mucho la exploración y los puzles, sucediéndose entre un argumento de lo más interesante. Por otro lado, la acción, que también tiene mucho protagonismo, está condicionada por la cantidad de munición que hay en el juego, teniendo que dosificarla bien si queremos salir con éxito de esta.
Vale, bebe mucho de Resident Evil, pero es uno de los mejores clones de la saga de Capcom que podemos encontrar. Un survival horror muy bueno técnicamente, con un gran argumento, un buen sonido con voces en castellano y un control más rápido y preciso que se aleja muchísimo de las entregas anteriores.
Por supuesto, Alone in the Dark: The New Nightmare apareció en otros sistemas. PlayStation, que todavía lo seguía petando, tuvo su propia conversión, inferior técnicamente a la de PC pero muy disfrutable. Por otra parte se aprovechó también la potencia de las nuevas consolas de 128bit como Dreamcast y PlayStation, siendo estas también muy competentes.
Premitidnos hablar también del cartucho aparecido para Game Boy Color. Pocket Studios hizo uno de los trabajos más impresionantes que podemos encontrar para la portátil de Nintendo en lo que a lo técnico se refiere. Los escenarios prerrenderizados están ahí con un Carnby pixelado que se mueve por ellos como pez en el agua.
Vale, el juego de Game Boy Color tiene algunas limitaciones, como por ejemplo la ausencia de Alice o un desarrollo más corto. Se obró el milagro en un cartucho de 32mb, sí, 32mb en una Game Boy Color. Nos viene a la cabeza cierto juego de Capcom para esta consola que tenía que haber tomado ejemplo.
En resumen. Alone in the Dark: The New Nightmare fue un regreso por todo lo alto. Todo un salto técnico y jugable que le sentó muy bien a la saga a pesar de, repetimos, sus similitudes con Resident Evil.
Lo que vino después
Alone in the Dark siguió vivo tras esta última entrega, pero no como se esperaba. En 2005, el infame director de cine Uwe Boll, especialista en películas de dudosa calidad basadas en videojuegos, hizo de las suyas con esta serie. Edwar Carnby (Christian Slater) y Alice Cedrac (Tara Reid) aparecieron en pantalla para continuar Alone in the Dark: The New Nightmare, pero mal, muy mal. El resultado fue una cinta horrible masacrada por público y crítica.
Hubo que esperar hasta 2008 para recibir un nuevo juego, ya con Atari a los mandos. Bajo el nombre de Alone in the Dark «a secas», desarrollado por Eden Games en sus versiones para PC, Xbox 360 y PlayStation 3, y por Hydravision en PlayStation 2 y Wii, se produjo un nuevo reinicio en la saga.
Esta vez se recupera el argumento de las primeras entregas y los hechos transcurren 83 años después del primer juego. Inexplicablemente Edward Carnvy, que tendría que ser un viejo decrépito, se encuentra en Nueva York hecho un mozo y con una amnesia de caballo. No recuerda nada y durante el juego tendrá que ir encajando las piezas que explicarán qué le ha pasado.
Mola, ¿verdad? Pues no tanto. Este Alone in the Dark fue duramente criticado por su malo sistema de control y su enorme cantidad de bugs, especialmente en las versiones de PC y Xbox 360. La versión de PlayStation 3, llamada Alone in the Dark: Inferno, corrigió muchos de esos problemas, siendo esta la mejor versión para esta entrega. El problema es que el daño ya estaba hecho y, pese a no ser para nada un mal juego, este reboot de la saga no fue lo esperado.
Un año más tarde, en 2009, Uwe Boll volvió a la carga, esta vez como productor, con Alone in the Dark II: El Regreso de las Sombras. Esta vez se contó con actores que solo se conocían en su casa y, como era de esperar, fue otro fracaso bien gordo en todos los sentidos.
Pero esperad, la cosa no acaba aquí. De los errores no se aprende y siempre es buen momento para meter la pata, otra vez, y esta metedura de pata tiene un mombre: Alone in the Dark: Illumination. Pure FPS y Atari lanzaron en 2015 un shooter en tercera persona completamente simplón que no aportaba nada a la saga. No lo hemos jugado, pero os podemos decir que no gustó a nadie, especialmente si tenemos en cuenta su 19 de nota media en Metacritic. Vamos, otra oportunidad perdida.
Y tras Alone in the Dark: Illumination la saga desapareció. Por suerte alguien se acordó de ella y THQ Nordic, que tiene los derechos de la saga, planea sacar un remake del primer juego para sistemas actuales. Su lanzamiento está previsto para principios de 2023, pero mientras esperamos, ¿os apetece un paseíto por la vieja mansión Decerto? Nosotros ya hemos vuelto.
Fase de bonus: Jack in the Dark
No queríamos marcharnos sin hablar de Jack in the Dark. Se trata de un mini juego que se distribuyó de manera gratuita en las Navidades de 1993, aunque también venía con la versión en CD-ROM del primer Alone in the Dark. Se trataba de un aperitivo para promocionar el lanzamiento del segundo juego de la serie.
El juego se basa en dos de los personajes de Alone in the Dark 2: la pequeña Grace y el malvado pirata Jack el Tuerto. Es Halloween y la pobre Grace se queda encerrada dentro de una tienda de juguetes bastante siniestra de la que deberá escapar.
En dicha tienda los juguetes están vivos, incluyendo a una malvada versión juguetera del amigo Jack, que amenaza al bonachón de Santa Claus, que está encerrado allí. Grace tendrá que resolver un puñado de puzles para salvar al gordinflón y a la Navidad en este simpático jueguecillo promocional.