InicioJuegosWorms, la guerra más grande jamás jugada

Worms, la guerra más grande jamás jugada

Resulta que para este artículo sobre Worms nos ha venido a la cabeza cierto juego llamado Gorillas. Se trataba de un sencillo juego, programado en BASIC, que venía incluido con el sistema operativo MS-DOS y en el que dos toscos gorilas se se lanzaban plátanos encima de unos edificios.

En Gorillas había que marcar el ángulo y la fuerza del disparo, y debías acertar para poder darle a tu rival. Pues esa es la premisa de Worms, nuestro protagonista de «la joya», el divertido juego de Team 17 en el que un grupo de gusanos se parten el lomo en escenarios de lo más variopinto.

worms_pc_1
Como podéis ver, el arsenal con el que contamos en Worms es muy amplio

Como decimos, Worms fue creado por Team 17 y lanzado en 1995 por Ocean Software. Apareció en muchos sistemas de la época, como los ordenadores PC, MAC y Amiga (y su consola Amiga CD32) y las consolas de 16bit Super Nintendo y Mega Drive. También se vio en PlayStation y Saturn, además de la malograda Jaguar, consola en la que salió más tarde, en 1998. Por último, nuestra querida Game Boy no se quedó atrás y tuvo su conversión.

Worms es un juego de estrategia por turnos en el que se enfrentan dos equipos formados por cuatro gusanos cada uno. Armados hasta los dientes, tendremos que derrotar a los gusanos del equipo rival. Todo con un sentido del humor muy marcado.

worms_pc_2
Las explosiones durante la partida estarán a la orden del día

El desarrollo es muy simple. El capitán del equipo comienza el turno y tendremos que mover a nuestro intrépido gusano al lugar donde mejor nos convenga. Podemos moverlo de izquierda a derecha, pudiendo saltar. Luego hay que escoger el tipo de arma que queremos usar, disparándola contra otro gusano o gusanos de nuestro equipo rival. Y para ello hay que mover el cursor de arriba a abajo, midiendo la intensidad de la fuerza del disparo. Esto último es importante si queremos dar en la diana.

No obstante, tenemos que tener en cuenta ciertas cosas. Por un lado hay un límite de tiempo en cada turno, así que tendremos que ser más o menos ágiles si no queremos perder nuestra oportunidad. Además, sufriremos daños si uno de nuestros gusanos cae al vacío o está demasiado cerca de la explosión de nuestra propia arma. Sobra decir, que el objetivo de cada partida es el de acabar con los gusanos de nuestro oponente, consiguiendo que su barra de energía se agote.

worms_pc_3
Uno de nuestros gusanos sueña con ser todo un luchador de cierto juego de Capcom

En Worms tenemos a nuestra disposición un total de 10 escenarios, cada uno con una ambientación y un tipo de terreno diferente. Esto es importante porque nuestros gusanos se colocarán aleatoriamente, y podemos estar sobre una montaña, al lado de un río o en el borde de un precipicio. Es fundamental conocer esto si queremos salir airosos en la contienda, especialmente para saber cuál es la mejor arma que podemos usar en cada caso.

El arsenal de Worms es de lo más completo. Podemos usar dinamita, lanzar granadas o usar ametralladoras, bazucas o escopetas, ¡hay de todo! También hay cosas más estrafalarias como la posibilidad de teletransportarnos a otro punto del mapa e, incluso, ejecutar ciertas técnicas muy conocidas por los amantes de los juegos de lucha. Esto último se conoce como «fire punch» y «dragonball».

worms_pc_4
Las cruces nos indicarán a los valientes caídos en batalla

Pero no solo de armas viven nuestros gusanos favoritos, podremos usar algunas herramientas. Si el terreno nos nos ayuda, podemos modelarlo con taladros o sopletes. Tendremos herramientas que nos permitirán escalar, empujar objetos o, por si fuera poco, inmolarnos. La verdad es que esto nos recuerda muchísimo a la saga Lemmings, de la que muy posiblemente Worms beba algunos sorbos.

En cuanto a los modos de juego, Worms tiene cosas interesantes. Jugaremos partidas rápidas y un modo liga, no hay un modo historia como tal. Podremos jugar contra la CPU o contra otro amigo o amigos, ya que, en teoría, dado el número de gusanos de cada equipo y los turnos, podrían jugar un total de ocho personas. Un modo de desafíos también está disponible, al menos en la versión de PC, que es a la que más hemos jugado.

worms_16bit
De izquierda a derecha y de arriba a abajo: Super Nintendo, Mega Drive y Amiga

Por otro lado tenemos opciones para aburrir, pudiendo personalizar el juego de arriba a abajo. Esto incluye la posibilidad de cambiar los nombres de nuestros ejércitos, tanto el del grupo en general como el de los miembros del mismo.

En general, los gráficos de Worms son coloridos. Los personajes son diminutos, sí, pero están muy bien animados. Luego, los escenarios, que tienen un tamaño bastante generoso, son variados. Por otra parte, el juego está lleno de humor, a veces algo negro, pues los pobres gusanos explotan sin contemplaciones.

worms_32bit
De izquierda a derecha: PlayStation, Saturn y Jaguar

Todas las versiones lucen bastante bien en términos generales, pero las más flojas son las de Super Nintendo y Mega Drive, que cuentan en su contra con un área de juego más pequeña. Y qué decir del cartucho para Game Boy, creemos que es un tipo de juego que no encajaba demasiado bien en la portátil de Nintendo, y así es.

Cabe destacar que las versiones en CD-ROM, es decir, PlayStation, Saturn, PC y Amiga CD32, cuentan con divertidas escenas animadas, además de una intro que nos mete de lleno en el mundo de Worms. Gracias a este formato podemos escuchar música durante las partidas, cosa que en las otras versiones no ocurre, solo hay efectos de sonido, que son en general muy buenos y divertidos. Mención especial para los gritos de los gusanetes.

worms_gb
La versión de Worms para Game Boy es quizá la menos disfrutable de todas

Inicialmente, Team 17 planeó Worms para el ordenador Amiga. Aunque en PC se lanzaron expansiones, en Amiga se contó con una versión exclusiva con el nombre de Worms: The Director’s Cut. Es una versión vitaminada del original, con gráficos AGA, nuevos objetos y armas y un editor de niveles, pero no tuvo demasiado éxito. Bastantes años después, en 2007, el original recibió un lavado de cara para Xbox 360, y un par de años más tarde, en 2009, lo hizo en PlayStation 3.

Lo que sí tuvo éxito es la saga Worms en general. A esta primera entrega le fueron sucediendo secuelas, de mayor o menor calidad (con un desastroso paso a las 3D), todo hay que decirlo, llegando a nuestros días, con juegos para PlayStation 5 o Xbox Series. Y es normal porque Worms es diversión en estado puro, con piques entre amigos garantizados. Una joya de los juegos de estrategia de lo más simpático.

Por cierto, si te entran ganas de probar Worms, puedes hacerlo en estos enlaces a las versiones de Super Nintendo, Mega Drive y Game Boy.

Artículos relacionados

2 COMENTARIOS

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Lo más popular