Supongo que muchos recordareis a Abobo, el tipo grandote que aparecía por sorpresa en Double Dragon rompiendo la pared y que podía eliminarnos las vidas rápidamente si no planeábamos bien nuestra estrategia contra él. Si no es así, deberíais echarle unas partidas a ese juego o ignorar el que voy a comentar a continuación, pues gran parte de su encanto reside en su bruto protagonista, tal y como indica el título del juego: Abobo’s Big Adventure.