- Compañía: Nintendo
- Año: 1985
- Género: Arcade de plataformas
- Plataformas: Game Boy Advance, Nintendo NES, Sharp X1
Hace ya bastantes años mi primo tenía un sucedáneo piratilla de la NES, una consola de esas que tenían un cartucho con tropecientos juegos. La primera vez que me la enseñó y cómo tenía dos manos, le pregunté si había algún juego en el que pudiésemos jugar los dos al mismo tiempo, y entonces apareció Balloon Fight, este divertidísimo arcade multiplataforma minimalista del que vamos a hablar hoy.
Balloon Fight fue uno de los primeros juegos que aparecieron en Nintendo NES, aunque aquí hasta 1987 no lo pudimos disfrutar, ya que la NES apareció un poco tardía. El juego, como ya hemos indicado, es minimalista hasta más no poder. No hay argumento y el objetivo es el de controlar a un personaje que lleva un par de globos atados y tiene que derrotar a unos pajarracos que también llevan globos, lanzándose contra ellos para explotar dichos globos y mandarlos a la porra de un batacazo, sin más, pero esto no significa que Balloon Fight no resulte divertido, al contrario.
Al principio las cosas parecen bastante fáciles, pero a medida que avanzamos en el juego se va complicando cada vez más, ¡y de qué manera oiga! Los enemigos se vuelven más astutos y nos encontraremos más peligros en pantalla. Estos peligros incluyen unas nubes que nos lanzan rayos si tardamos mucho en eliminar a nuestros oponentes o una especie de pez gigante que nos aguarda en el foso de la parte inferior de la pantalla y, si nos paseamos cerca de allí, nos puede engullir con facilidad.
Durante nuestro periplo por Balloon Fight encontraremos fases de bonus. Estas fases consisten en recoger globos que van saliendo de unas tuberías (sí, el espíritu de Mario Bros. también está presente, que para eso es un juego de Nintendo) con el objetivo de conseguir la mayor cantidad de puntos posibles.
Y poco más podemos decir sobre el desarrollo del juego salvo que cuenta con un control tan minimalista como el propio título. Simplemente usamos uno de los botones del pad de la NES para elevar a nuestro personaje, pulsando repetidas veces sobre él para que alce el vuelo hasta la posición deseada, pero con mucho cuidado, pues si nos situamos debajo de los pajarracos nos pueden ir machacando nuestros globos sin piedad y podemos perder una vida.
Por otra parte hay varios modos de juego para escoger. Tenemos la aventura para un sólo jugador, el modo para dos jugadores y un modo bonus. El modo para dos jugadores es sin duda la estrella de Balloon Fight, pues jugaremos cooperando con otro amigo para ir librándonos de los enemigos que aparecen en pantalla, aunque también podemos picarnos entre nosotros y librar combates a muerte destruyendo los globos de nuestro oponente, de modo que en este caso vosotros decidís: cooperar para combatir contra la invasión del pajarraco o luchar ferozmente a ver quién es mejor destrozando los globos del contrario. Finalmente, el otro modo de juego consiste en superar una fase de bonus recogiendo globos y esquivando unos rayos, algo que se convierte en una tarea muy difícil, pues nos sirve para aprender a controlar perfectamente a nuestro personaje.
Técnicamente no es un juego puntero ni mucho menos. Los escenarios son muy vacíos, predominando el color negro salvo por los elementos que aparecen en pantalla. El sonido tampoco es para tirar cohetes, contando con una tonadilla al inicio y al final de cada nivel, porque el resto es una sucesión de pitidos poco variados. La estrella es la jugabilidad y que, una vez dominado el control del personaje, nos ofrece partidas divertidas. Eso sí, dominarlo es sencillo y una vez que le cogemos el truco puede aburrir un pelín, así que es mejor dosificar las partidas y disfrutarlo como se merece, especialmente en partidas multijugador, que es dónde realmente despunta Balloon Fight.
Un juego «made in Nintendo» sólo podía aparecer en una consola como la NES, pero de hecho también apareció en el ordenador japonés Sharp X1 y años más tarde en la portátil Game Boy Advance. Por otra parte, Nintendo lo licenció en recreativas para su serie «Play Choice» y también lo podemos conseguir en las consolas virtuales de Wii, Wii U y Nintendo 3DS.
Balloon Fight es un título poco pretencioso que en ningún momento quiere competir con los más grandes del género (de hecho su parecido con el Joust de Williams es bastante evidente). Eso sí, detrás de su pobre apartado técnico se esconde una jugabilidad endiablada que nos puede dar para pasar muy buenos ratos. Quizá hoy en día pueda parecer excesivamente simple, pero os aseguro que hace algunos años era un auténtico vicio de juego.
