5 RPGS PARA MEGA DRIVE QUE NOS ABRIERON LAS PUERTAS

Hace ya algunos meses, desde esta humilde web, hicimos un artículo de corte similar sobre cinco grandes juegos de rol que salieron para Super Nintendo, y que lo hicieron de manera más que notable en nuestro país. En esa ocasión hablamos de juegos para Super Nintendo, una consola que cuenta en su catálogo con un nutrido grupo de joyas roleras, pero en Mega Drive, su competencia directa en manos de Sega, tampoco se quedaron atrás. Vale, es cierto que en Mega Drive la lista de RPGs no es tan extensa como en Super Nintendo, pero la consola cuenta con verdaderas maravillas, algunas de las cuales llegaron incluso traducidas a nuestro idioma.

Hoy vamos hablar de juegos de la talla de Landstalker: The Treasures of King Nole, Phantasy Star IV, Soleil, The Story of Thor y Light Crusader, tremendos exponentes de este género en la 16bit de Sega. Nos vamos a dejar algunas otras joyas en el tintero, pero estos cinco juegos fueron abanderados del género en España e hicieron las delicias de miles de aficionados a este tipo de juegos. ¿Qué tal si vemos de qué estamos hablando?

Landstalker: The Treasures of King Nole

Landstalker: The Treasures of King Nole es un juego de rol de acción que apareció en Japón más o menos a finales de 1992. Un año más tarde desembarcó en Estados Unidos y también en Europa. Antes de nada, debemos señalar que el juego que llegó a España lo hizo en inglés, pese a que existen versiones localizadas en francés y alemán. El asunto está en que si bien anunciaron que el juego iba a salir en textos en castellano, Sega España no logró que así fuera pese a que esa era su intención, y al parecer todo fue debido a que Sega no solicitó un número de unidades suficiente del cartucho que justificaran el coste de su traducción. Por suerte, aunque fuera en inglés, el juego llegó a las tiendas españolas.

Traducciones e idiomas a parte, Landstalker: The Treasures of King Nole, como decimos, es un juego de rol y acción en perspectiva isométrica en el que controlaremos a un caballerete llamado Nigel. En sus aventuras varias conoce a un hada que le pide que le ayude, pues conoce el secreto de un gran tesoro, el tesoro del Rey Nole, y unos maleantes la persiguen. Nuestro interés por el vil metal nos llevará a vivir una gran aventura protegiendo al hada de marras en busca de tan fabuloso tesoro, y de paso luchar contra los malvados que quieren su pellejo. Y todo a lo largo de una isla grandecita en la que encontraremos peligros de todo tipo y muchas cosas que hacer.

Pues bien, comenzaremos hablando del control, ya que en un inicio tenemos una especie de tutorial no guiado en el que podremos ir aprendiendo las habilitades básicas de nuestro guerrero. Al principio cuesta un poco hacerse con él por la perspectiva y el movimiento un tanto robótico que tiene nuestro personaje, pero después iremos viendo que no es para tanto. Como es un «action RPG», los combates se desarrollan en tiempo real, así que tocará tirar de nuestra espada, de los ítems que encontremos por ahí y de una opción de salto que nos vendrá muy bien, pues este juego tiene momentos de plataformas que debemos superar con pericia y buen hacer.

Por lo demás, el apartado de Landstalker: The Treasures of King Nole es muy bueno. Los chicos de Climax, creadores del juego para Sega, hicieron un buen trabajo en todos los aspectos, incluyendo un apartado audiovisual genial, con gráficos simpáticos y coloridos y un sonido muy bueno. Y lo hicieron más que bien, ya que el juego fue bastante exitoso y de ahí surgieron otros títulos para otros sistemas que se podrían considerar secuelas, como el estupendo Dark Savior para Saturn o el genial Time Stalkers para Dreamcast.

Phantasy Star IV

La saga Phantasy Star siempre ha sido uno de los máximos exponentes del género RPG en las consolas de Sega. Phantasy Star IV o Phantasy Star: The End of the Millennium, es la cuarta entrega de esta serie creada por Sega y se lanzó en Japón a finales de 1993, pero hasta el año 1995 no lo tuvimos por aquí. Al igual que sus antecesores (la primera entrega es para Master System), llegó en inglés, pero lo fundamental es que llegó y lo hizo embutido en un cartuchaco de 24 megas, siendo uno de los títulos más espectaculares de la última hornada que recibimos para la bestia negra de Sega.

El argumento de este RPG de la vieja escuela, de ambientación espacial y con combates por turnos transcurre entre el segundo y tercer juego, con unos cuantos años de diferencia entre medias. Sigue el argumento de los otros juegos, centrado en una saga relacionada con un sistema solar llamado Algol, siendo el último Phantasy Star cuya historia tiene que ver con este sistema solar. Los protagonistas son dos cazadores llamados Chaz y Alys, que tienen que investigar unos extraños sucesos ocurridos en Motavia, planeta del sistema solar Algol y muy popular en la serie. Todo esto les llevará a enfrentarse a Zio, un malvado mago súbdito de Dark Force, que a su vez es súbdito de Profund Darkness, quien amenaza con llevar a la oscuridad a todo el sistema Algol.

Con esta premisa nos encontramos ante un juego muy destacable dentro del catálogo de Mega Drive. Cuenta con una variada selección de opciones dentro de su sistema de combate por turnos en el que destaca una opción muy importante llamada «macro», que básicamente cosiste en guardar secuencias de comandos dentro de una misma opción para que estos se repitan con sólo pulsar un botón, siendo un elemento que hace que los combates sean más ágiles. El resto es un argumento apasionante que combina un apartado técnico increíble que saca jugo de las entrañas de Mega Drive, siendo uno de los RPGs más memorables del sistema.

Junto a Phantasy Star II, este Phantasy Star IV es uno de los mejores títulos de la saga, ya que a partir de ahí las cosas cambiaron en sucesivos títulos, creando dos subseries más llamadas Phantasy Star Online y Phantasy Star Universe, cuyo argumento ya no tiene nada que ver con este. Por último hay que señalar que además del cartucho para Mega Drive, este juego está disponible en recopilatorios que salieron para consolas como Saturn o PlayStation 2, y es que si sois amantes de los RPGs por turnos de toda la vida, fijo que Phantasy Star IV os va a encandilar.

Soleil

En 1994 desembarcó este genial RPG de acción con toques aventureros para Mega Drive, siendo el primero traducido al castellano para esta consola. Llamado Soleil en territorio europeo, Crusader of Centy en Estados Unidos y Ragnacenty en el país del sol naciente, este titulazo creado por NextTech y distribuido por Sega y por Atlus según qué zona, tal vez os recuerde mucho a la saga The Legend of Zelda, y es que los usuarios de Mega Drive no tenían nada parecido en su catálogo (lo más parecido era aquel Golden Axe Warrior para Master System).

La historia comienza en el 14 cumpleaños de nuestro héroe, que recibe una espada como regalo y lo celebra junto a sus amigos (sí, veremos nombres como Pepe o Paco entre nuestros colegas, una constante en la versión española del juego). Hecho todo un chavalote, llega el momento de hacer algo de provecho y nuestro amado y querido rey nos da permiso para iniciarnos como soldados del reino. A partir de este momento empiezan los problemas y una terrible amenaza se cierne sobre nuestro mundo, de modo que comienzan a salir criaturas oscuras que quieren liarla parda.

Vamos, que el argumento de Soleil es más o menos lo de siempre. La principal diferencia que vamos a encontrar con otros juegos similares es que, a raíz de los extraños sucesos que acontecen, las personas pierden toda capacidad de comunicación, pero nuestro personaje tiene el don de poder hablar con los animales, así que tendremos a nuestra mascota Tintín, nuestro fiel perro, que nos ayudará en nuestra tarea. Además de otros animales con los que charlar, podremos contar con otros simpáticos animalejos que nos serán muy útiles, ya que cada uno cuenta con una habilidad especial que los hace únicos. De esta forma podremos llevar con nostros hasta dos animales al mismo tiempo, y los usaremos dependiendo de las circustancias que se den en el momento, por lo que habrá que tomar buena nota y pensarlo bien para elegir los animales que más falta nos hagan.

Soleil cuenta con un genial apartado técnico. Los gráficos son coloridos y simpáticos, el sonido va muy acorde con la aventura y la jugabilidad es dinámica y sencilla, ya que los combates son el tiempo real. Por desgracia Soleil no tuvo ninguna secuela, pero eso no importa, ya que en su momento fue muy bien recibido y disfrutado por los amantes del género. Y encima, como ya hemos dicho, llegó con una estupenda traducción al castellano, algo que pone la guinda a uno de los cartuchos más aplaudidos en el catálogo de Mega Drive. Una aventura genial.

The Story of Thor

Otro «action RPG» de corte similar a Soleil. De nuevo bien traducido a nuestro idioma, The Story of Thor (con el subtítulo de A Successor of the Light), creado por Ancient, llamado Beyond Oasis en Estados Unidos y lanzado en nuestro país en 1995, es otra joya del catálogo de Mega Drive, que destaca entre otras cosas por su potentísimo apartado audiovisual. De nuevo estamos ante un juego de rol con mucha acción y toques aventureros, y de nuevo estamos ante un juego que bebe mucho de The Legend of Zelda.

En esta obra maestra para Mega Drive ambientada en el lejano oriente, manejamos al príncipe Alí (sí, tiene un nombre muy original, lo sabemos). Alí es aficionado a buscar reliquias y, en sus pesquisas, descubre un brazalete de oro. Cuenta la leyenda que ese brazalete, tiempo atrás, mantenía una lucha con otro brazalete, pero de plata y creado por un hechicero maligno, así que Alí lo que hace es desencadenar un terrible poder que amenaza la tierra en la que habita. Su misión consistirá, armado con el brazalete de oro, hacer frente a las fuerzas malignas desencadenadas por el brazalete de plata, y para ello tiene que reunir los cuatro poderes principales en forma de espíritus que alberga la joya dorada.

Aquí comienza nuestro viaje por The Story of Thor, un viaje que consistirá en dominar a los cuatro poderes principales del brazalete para derrotar a todo el mal que nos acecha. Y lo haremos con combates en tiempo real de lo más interesantes, ya que el control de Alí es similar al control de cualquier personaje de un juego tipo «brawler» (de hecho ciertos efectos de sonido parecen sacados de Streets of Rage), y eso nos lleva a realizar ataques especiales, patadas, puñetazos e incluso seremos duchos en el manejo de las armas. Pero lo más intersante en el combate es aprender a manejar esos poderes que iremos adquiriendo a medida que avanzamos, y eso lo haremos enfrentándonos a espectaculares enemigos y resolviendo algún que otro puzle.

Técnicamente The Story of Thor es uno de los títulos más punteros del catálogo de Mega Drive. Personajes grandes, bien detallados y animados, buena banda sonora y efectos de sonido, textos 100% en castellano y un desarrollo muy intersante. Todo ello lo convierten en uno de los grandes de la 16bit de Sega. Disfrutó de cierto éxito, por lo que apareció una secuela para Saturn titulada The Story of Thor 2 o The Legend of Oasis en Estados Unidos, que superaba su apartado técnico y que, desgraciadamente, nos llegó en inglés. En fin, que estamos ante uno de los imperdibles del listado de juegos para Mega Drive y ante uno de los mejores en su género.

Light Crusader

El último juego que os ofrecemos apareció en 1995 y también lo hizo traducido al castellano. Hablamos de Light Crusader y de nuevo nos quitaremos el sombrero, ya que sus creadores fueron una de las compañías creadoras de algunos de los juegos más originales y memorables de la historia: los japoneses Treasure, de los que ya hemos hablado en esta web. Y es que para esta ocasión, Treasure deja atrás sus icónicos shooters y se centra en un juegazo que combina rol, acción, aventura y plataformas.

Nos vamos a una época medieval en la que Sir David, nuestro protagonista, viaja a la ciudad de Green Row. Allí es convocado por el rey, quien le encomienda la misión de descubrir porqué esta ciudad hay personas que desaparecen sin explicación aparente. Y ahí lo dejamos, ya que la historia se va volviendo interesante y emocionante a medida que avanzamos.

Ya metidos en harina, Light Crusader se nos presenta como un juego con perspectiva isométrica en el que habrá que hablar con muchos y variados personajes y enfretarnos a diversos enemigos en combates en tiempo real con ayuda de nuestra fiel espada. También saltaremos, ya que hay secciones de plataformas, y utilizaremos nuestros poderes mágicos que iremos perfeccionando con el tiempo y que están representados por unas esferas. También hay que resolver puzles en plan empujar objetos o activar mecanismos.

Gráficamente, como se podía esperar de Treasure, el juego cumple muy bien. Escenarios detallados y personajes estilizados con una apariencia bastante adulta en contraste con los protagonistas de los otros juegos que hemos comentado. El sonido tampoco está mal y el manejo de nuestro personaje se podría haber pulido un poco, ya que al tratarse de un juego en perspectiva isométrica cuesta un poco hacerse con él (algo que ya habíamos señalado más arriba al hablar de Landstalker). Por lo demás se trata de otra gran aventura muy trabajada y muy a tener en cuenta, que destaca por su argumento. Lamentablemente no hubo ninguna secuela, y eso que fue un título que recibió críticas positivas y del que desde Sega España tomaron buena cuenta al incluir textos en castellano. Otro imprescindible.